De fábrica de cemento a museo del cemento
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William Aspdin
© Museo del Cemento Asland de Castellar de n’Hug (Photo: Luigi)
© Museo del Cemento Asland de Castellar de n’Hug (Photo: Luigi)
La Revolución industrial creó una oleada de nuevas construcciones sin precedentes en Europa. Las ciudades surgían por todas partes con túneles, puertos, puentes y fortificaciones. La investigación para hallar un conglomerado hidráulico más resistente y más rápido que la cal continuaba.
A partir de 1796 ya aparecen patentes para cementos en Inglaterra y en 1824, un albañil, Joseph William Aspdin, patentó un cemento llamado Pórtland. En 1843, su hijo descubrió un procedimiento para fabricar un cemento que era realmente innovador, más fuerte en compresión y en tensión que cualquier de los mejores de su tiempo. Protegió su descubrimiento con el nombre patentado por su padre.
A partir de 1796 ya aparecen patentes para cementos en Inglaterra y en 1824, un albañil, Joseph William Aspdin, patentó un cemento llamado Pórtland. En 1843, su hijo descubrió un procedimiento para fabricar un cemento que era realmente innovador, más fuerte en compresión y en tensión que cualquier de los mejores de su tiempo. Protegió su descubrimiento con el nombre patentado por su padre.